Ok, entre todas las cosas
absurdas que podrían merecer un espacio,
esta gano el premio mayor, es demasiado indignante la propuesta del gobierno de
la ciudad de México para combatir el acoso sexual que sufren las mujeres en la vía
publica.
Es enserio? Un silbato? Por
favor, si no pretenden atender las miles de denuncias, al menos no lo
conviertan en burla.
En que miserable cerebro sin usar
cabe la idea de que con un silbatazo los índices de acoso y violencia sexual
van a disminuir? Ok, podríamos pensar que serviría de alerta ante un ataque,
pero si los elementos de seguridad pública son deficientes, de que sirve ir por
la vía pública silbando?
Y aunque esto fuera una buena
idea (imaginemos que así es) de verdad van a atender la gama de chiflidos que
se oyen por toda la ciudad?
Señores, a diario se presentan cientos
de denuncia por acoso, y pocas son atendidas. En el metro de la ciudad de México
se dan cientos de casos y aunque no todos son denunciados, los que sí lo son no
pasan de ser ignorados por el personal de seguridad de las instalaciones
correspondientes. Las respuestas que dan los elementos de seguridad han llegado
a ser cínicas y burlonas: “Ni es para tanto, esto pasa diario” “es bastante común,
ni le hagas caso” “Pues que quieres que haga?” Y si así van a responder ante las
denuncias que se generen por los dichosos silbatos, de que nos sirven estos?
Y de hecho, si este silbatito cae
en manos de una fanática feminazi, la particular arma se va a convertir en
motivo de chantaje, porque no va a faltar la desubicada que pretenda usarlo
para denunciar al viento que toco su cabello, o al ciego que no le quita la
mirada de encima.
Además, los índices de acoso varían
dependiendo la zona, es evidente y bastante lógico que en zonas de clases menos
privilegiadas (que somos casi todos) el problema sea una cuestión más
alarmante, ya que prácticamente no hay lugar seguro.
Por si lo anterior fuera poco, el
acoso no es meramente hacia el género femenino, este problema abarca ambos géneros y cualquier rango de edad
(degenerados hay de muchos tipos) cual sería su propuesta? Repartir un silbato
a cada habitante? Dividir espacios en zonas especificas para transeúntes femeninos
y masculinos? La mitad del metro para hombres, y la mitad para mujeres. Por favor,
las medidas contra el acoso no son suficientes.
Ahora, la culpa de esta situación
no es enteramente del gobierno de cualquier estado, porque la educación de los
individuos se da en el hogar (o al menos, de la mayoría) y es ahí donde se
forman las ideas y costumbres de una persona, además de la intervención del
colegio y comunidad durante la infancia y etapa adolescente. Si se pretende
erradicar el acoso sexual y la violencia el primer paso se da en el entorno
familiar, donde la responsabilidad es completamente de los padres de familia
encargados de educar a los infantes a su cargo. No nos podemos quejar de los
silbatos si no nos preocupamos por la forma en que educamos a los futuros ciudadanos.
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